Por fin, estamos de enhorabuena, el sábado la UDA (División
de Honor) consiguió la tan deseada y costosa tercera victoria de la temporada,
seguimos estando en problemas clasificatorios pero fueron tres puntos de oro para
el equipo, por lo menos podrán afrontar el parón de Navidad con algo de
tranquilidad, otra derrota más hubiera sido muy decepcionante y peligroso para
el nuevo objetivo que tendremos por delante para el año 2014.
El partido se disputó el sábado contra el Real Unión, un
equipo bien situado en la tabla y que suele practicar un juego vistoso y de
calidad, no era el mejor adversario para la situación en la que se encuentra el
Aretxabaleta pero es que ahora casi todos los equipos van por delante y no
puede ser una excusa, ahora sí que es necesario el repetido tópico de "partido a
partido". Por lo tanto podemos sacar tres conclusiones positivas, por un
lado se ha conseguido vencer en su casa a un equipo que en estos momentos es
superior, por lo que sabemos que el
equipo está capacitado para ganar a cualquiera, los propios jugadores lo habrán
comprobado y creerán más en sus posibilidades futuras. La segunda conclusión es
que se ha mantenido la portería a cero, en el partido anterior me pareció que
la defensa tenia algo más de seguridad a pesar de que el rival marcó dos
golazos, pero con este marcador parece que se va mejorando en este aspecto. El
tercer aspecto positivo es que marcando un sólo gol fuera de casa se ha conseguido
la victoria, se le ha sacado máxima rentabilidad a los goles, por fin el equipo
ha demostrado mayor equilibrio en la defensa y en el ataque.
El siguiente partido ya se disputará el fin de semana de
Reyes contra el Ostadar, otra vez fuera de casa, contra un equipo que ha sido
apaleado por el Anaitasuna durante esta jornada, hay que mantener la
concentración a tope e intentar emular el partido realizado en Irún. Pero antes
el equipo tendrá un tiempo importante para limar algunos aspectos en los que ha
tenido problemas hasta ahora, el equipo técnico tendrá la posibilidad de
organizarse mejor para afrontar un 2014 que sin duda alguna será duro. Haciendo
números, el año pasado el Aurrerá de Ondarroa libró la categoría consiguiendo
35 puntos, a priori puede ser el objetivo a alcanzar para mantenernos de nuevo
en la categoría. Esto significa que el equipo tiene que conseguir 21 puntos más
de los que tiene ahora, lo que equivale a 9 victorias de los 19 partidos que
queda por disputar esta temporada, no será nada fácil pero con el apoyo de
todos lo conseguirán.
La parte negativa se la ha llevado otra vez el Juvenil Liga
Vasca, que ha caído por 5 goles a 0 contra el Balmaseda, siguen en la cola de
la clasificación atascados con los siete puntos que consiguieron hace muchas
jornadas, no pinta nada bueno, esperemos que el Año Nuevo les traiga mejor
suerte. Al 1ª REGIONAL le tocaba descanso esta jornada, de todas maneras ya no
tiene que jugar más partidos de la primera fase y se ha clasificado invicto, es
el único equipo de todos los grupos que pasa sin perder ningún partido, con 10
partidos ganados y dos empatados.
LA TREGUA DE NAVIDAD
Así es, en Pasión Celeste pararemos la actividad hasta que
los equipos empiecen de nuevo a disputar partidos, esperemos que no coman
muchos polvorones porque les vamos a necesitar en plena forma para el 2014
jajaja. Pero para despedirnos quiero hablar de una tregua, pero no es la que el
fútbol se va a tomar estas semanas, es otra, una que ocurrió en 1914 y que está
muy relacionada con la Navidad y el fútbol.
Ocurrió a los seis meses de comenzar la PRIMERA GUERRA
MUNDIAL, parecía que aquel enfrentamiento entre las principales potencias
europeas no sería tan largo, una simple demostración de fuerza. Por un lado el
Imperio Austrohúngaro y el Imperio Alemán, declararon la guerra a Francia y
Gran Bretaña, aquella gente no lo sabía pero la llamada Gran Guerra no había
hecho más que comenzar, finalizaría en 1918. Pero la fecha que nos importa a
nosotros, para contar esta historia, ocurrió en el frente francés, en las
trincheras que muchos de nosotros hemos visto en las películas, apestosos
agujeros llenos de barro y de ratas que además coincidió con unos de los
inviernos más crudos que se recuerdan en el siglo XX, en aquellas trincheras
murieron millones de personas, por las balas, las enfermedades y el frío.
Pero un día, el 24 diciembre llegó la Navidad al frente, los
oficiales alemanes tuvieron una idea para animar a su tropa un día tan
especial, les doblaron los suministros de tabaco, alcohol y alimentos, los
soldados se alegraron mucho de aquellos pequeños regalos en un tiempo tan duro
por lo que decoraron las trincheras con luces de Navidad y empezaron a cantar
fuertemente villancicos. Los británicos que estaban al otro lado, no quisieron
ser menos que sus enemigos por lo que también empezaron a cantar Noche de Paz a
todo trapo, en vez de lanzar balas se enfrentaban por medio de los villancicos.
Durante aquel día se fue creando cada vez mejor rollo y terminaron enviando
emisarios de un lado a otro de la trinchera para intercambiar regalos, sobre
todo los productos que hemos señalado anteriormente. Pero no fue suficiente
porque poco a poco los soldados de uno y otro bando, desoyendo las órdenes de
sus oficiales se reunieron en tierra de nadie, obligando a la artillería de los
dos bandos a mantenerse en silencio. Aquello debió ser de ver, los soldados
alemanes y británicos intercambiaban cigarrillos, hablaban sobre el transcurso
de la guerra, enseñaban las fotos de sus seres queridos y encima les dio por
jugar un partido de fútbol, porque ¿a donde no llega el fútbol?.
Un teniente alemán llamado Nieman, cuenta los hechos
ocurridos durante aquel partido de fútbol, se enfrentaron los alemanes contra
los británicos en el que se respetaron perfectamente las reglas del juego y eso
que no jugaban con árbitro:
“Un soldado escocés apareció cargando un balón de fútbol; y
en unos cuantos minutos, ya teníamos juego. Los escoceses ‘hicieron’ su
portería con unos sombreros raros, mientras nosotros hicimos lo mismo. No era
nada sencillo jugar en un terreno congelado, pero eso no nos desmotivó.
Mantuvimos con rigor las reglas del juego, a pesar de que el partido sólo duró
una hora y no teníamos árbitro. Muchos pases fueron largos y el balón
constantemente se iba lejos. Sin embargo, estos futbolistas amateurs a pesar de
estar cansados, jugaban con mucho entusiasmo. Nosotros, los alemanes,
descubrimos con sorpresa cómo los escoceses jugaban con sus faldas, y sin tener
nada debajo de ellas. Incluso les hacíamos una broma cada vez que una ventisca
soplaba por el campo y revelaba sus partes ocultas a sus ‘enemigos de ayer’.
Sin embargo, una hora después, cuando nuestro Oficial en Jefe se enteró de lo
que estaba pasando, éste mandó a suspender el partido. Un poco después regresamos
a nuestras trincheras y la fraternización terminó. El partido acabó con un
marcador de tres goles a favor nuestro y dos en contra. Fritz marcó dos, y
Tommy uno”.
Pero lamentablemente, al día siguiente la guerra se tuvo que
reiniciar, los altos mandos no estaban dispuestos a que los soldados
confraternizaron demasiado entre ellos. Los alemanes perderían la guerra pero
por lo menos ganaron el partido contra los británicos por 3 a 2. No obstante en
las guerras todos son vencidos porque se fulmina vidas humanas de las que no
importan las nacionalidades, pero aquel día pasó a la historia como la TREGUA
DE NAVIDAD.
AÚPA UDA,
FELIZ NAVIDAD Y PRÓSPERO AÑO NUEVO 2014 PARA TODOS.
No hay comentarios:
Publicar un comentario