CUANDO EL FÚTBOL HACE SOÑAR

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No hay palabras para expresar lo que se vivió el domingo en Ibarra, climatología perfecta, la afición motivada y todo el pueblo revolucionado por el partido gracias al trabajo encomiable de los aficionados y la directiva. Nada podía fallar en un campo abarrotado como pocas veces se ha visto, incluso muchos habían llegado al campo acompañados de la charanga con el himno de la UDA a todo meter, una pancarta y bandera en ristre. Todos los allí presentes teníamos claro que el rival sería un hueso duro de roer pero confiábamos en que nuestros chicos consiguieran una victoria para tener pie y medio en la tercera división. Lo cierto es que en muchos momentos me pareció estar viviendo una auténtica "película americana", de esas en la que el bueno de el equipo protagonista culmina una jugada en el último segundo y se reconcilia con la tía buena de turno.

Fue así, tal cual, el pasacalles encabezado por la charanga que entró en el campo de fútbol cuando los jugadores se retiraban al túnel de vestuarios después de realizar el calentamiento. Los siguientes minutos fueron para el disfrute de toda la afición, en el momento que los jugadores salieron al césped con el himno de la UDA de fondo y el color lo pusieron unos jóvenes con bengalas rojas, eso sí, es de agradecer que las encendieran fuera del campo y con responsabilidad. Ya estaba todo preparado, incluso la alineación compuesta por Castellanos, Gartzi, Arri, Etxabe, García, Piru, Urtzi, Eraña, Sánchez, Pérez y Arizmendi. Prácticamente el equipo de gala, sólo alterado por la baja de Espinosa.

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Por fin el árbitro pito el inicio del partido, los primeros minutos sirvieron para que los equipos se conocieran, desde muy pronto se pudo ver cómo el Getxo no estaba dispuesto a tomar ningún riesgo, mantuvieron prácticamente durante todo el partido más de seis jugadores por detrás de la línea del balón, los laterales prácticamente no se prodigaron en ataque. El Aretxabaleta que quería la posesión del balón y trataba de darle velocidad al juego, pero el equipo vizcaíno se dedico a detener el juego continuamente. Demostró ser un equipo con mucho oficio al que le valía el empate y no se cortaron a la hora de despejar cualquier balón peligroso. Lo bueno fue que por medio de las faltas el equipo celeste comenzó a tener presencia en el área. De una de estas jugadas a balón parado nació el gol de los nuestros, cuando Etxabe remató con el pie un balón peinado por un compañero. Así término la primera parte, con un marcador esperanzador y con la certeza de que los visitantes tendrían que salir de la cueva.

Se sabía que en la segunda parte el Getxo arriesgaría en los primeros minutos, adelantaron la defensa y prácticamente en una de las primeras jugadas consiguieron un saque de esquina que remató con precisión uno de los centrales visitantes, consiguiendo el empate. Por desgracia había que empezar otra vez desde cero, otra vez amartillar a un equipo rocoso, un auténtico bloque de hormigón. A partir de entonces los visitantes se acomodaron atrás y la UDA trató de poner toda la carne en el asador para llevarse la victoria. Gorka decidió sacar otros jugadores frescos para percutir contra la defensa foránea, en el minuto 11 Aitor Pérez dejó su puesto para que entrara Ander, parece que el extremo del Aretxabaleta le dio algo de velocidad al juego.

Un poco más tarde en el minuto 14 de esta segunda parte, llegó la sorpresa cuando Barkero se vistió la camiseta de la UDA y se preparó para sustituir a Eraña, fue increíble como toda la afición se puso en pie para recibir al hijo pródigo. Otra vez volvía a activarse el largometraje americano, ya teníamos al actor principal en el césped. No obstante, el equipo no podía con el ritmo ni podía circular el balón con cierta velocidad, si un jugador de la UDA conseguía desbordar un rival enseguida aparecía otro para hacer falta y detener el juego, encima eran penalizaciones muy lejos del área. Entonces Valle volvió a mirar al banquillo para cambiar de estrategia, retiró a Arizmendi en el minuto 26 para dar entrada a Oxel, tratando de aprovechar el juego de espaldas del veterano jugador. Entonces llegaron a hacer algunas jugadas de peligro muy cerca del área, Barkero, Piru, Sánchez y compañía trataban de triangular entre un mar de piernas con poco éxito.

Otro cambio en el minuto 34 cuando un fatigado Sánchez dio entrada a Badillo. Fueron  esos momentos los más emocionantes del partido, apretaban y apretaban buscando el gol de la victoria, el público puesto en pie dispuesto a celebrar un gol maravilloso. Y llegó la deseada oportunidad cuando en un saque de esquina al segundo palo Etxabe devolvió el balón hacia el centro y Urtzi remató de cabeza al palo, sólo faltaban cuatro minutos para finalizar el partido y el tema se complicaba aún más.

Pero en el minuto 45 llegó una jugada especial, una falta en la posición ideal para pegarle con pierna izquierda, ahora sí que parecía "Evasión o victoria", uno de los mejores especialistas que ha dado la liga profesional en los últimos tiempos, el hijo que volvía a casa para rematar la jugada y situar a la UDA en tercera división. Pero no pudo ser, el golpeo se fue por encima del larguero, se vio que las películas sólo son ficción y que los milagros no existen, pero bueno soñar es gratis y fue bonito mientras duró. Finalmente la UDA venció en los penaltis, que se lanzaron por si hubiera un triple empate en la promoción, la semana que viene habrá que buscar la victoria en Gasteiz.

AÚPA UDA